Los ciudadanos no podemos declarar la PAZ. Tampoco la Guerra aunque creamos que sí. Pero es cierto que es más fácil declarar la Guerra que la Paz, si solo somos los actores de la obra teatral.
El Roto en El País hizo una viñeta perfecta, pero sabiendo que en realidad el futuro está en el aire y que no depende tanto de las personas que estamos en la calle, como del tipo de personas que se esconden en los despachos.
De todas las formas, pedir la PAZ es mucho más edificante para cada uno de nosotros, que pedir la GUERRA como hacen algunos torpes sociales, sin entender nada de este mundo.