Oficio de Tinieblas 5. Cela diferente. O no

Posiblemente el primer libro que yo intenté leer dentro del mundo del (casi) surrealismo literario, en ese mundo de las literaturas curiosas, raras, diferentes, fue este. Oficio de Tinieblas 5 de Camilo José Cela supuso para mi en su momento, descubrir que había más formas de escribir que plantear historias realmente construidas.

Explicar este libro bien, es imposible sin tenerlo en la mano o siempre me lo ha parecido a mi. Sencillamente es que creo que explicarlo es destruirlo, es convertirlo en algo irreal. No creo que Cela escribiera este libro para ser explicado.

Decía en su primera página: "Naturalmente, esto no es una novela sino la purga de mi corazón". Una frase con dolor.

Publicada por primera vez en el año 1974, cuando ya tenía 58 años de edad, es una obra madura, y no es ni una obra casual, ni algo que no fuera a ser una obra libre que sabía hacia dónde lo podría llevar.

La lógica o ilógica narrativa que leemos en Oficio de Tinieblas 5, podría ser la respuesta del autor a la pregunta que él mismo se hacía: ¿Qué pasaría si olvidásemos las convenciones literarias? ¿Si escribiéramos de otra manera diferente?

Era crear una literatura sin aparente claridad, que precisamente hace de la falta de estructura su forma de crearse de forma distinta y de la falta de sustancia su propio sabor original, una obra deliberadamente “anti-literaria”, para plantar y plantearse si no se podía escribir de otras maneras.

Posiblemente sus lectores no lo entendieron así. La ¿novela? Oficio de Tinieblas 5 representa una obra fundamental en la carrera literaria de Camilo José Cela. Su innovación formal, su profundidad temática y su carácter provocador la convierten en un referente del tremendismo y en un testimonio de la España de la posguerra. 

Cabe señalar que la obra no está exenta de polémica desde el principio. Algunos críticos han cuestionado la visión pesimista de Cela y su uso de un lenguaje violento y crudo.

Oficio de Tinieblas 5 recibió una acogida dispar por parte de la crítica y el público. Algunos la consideraron una obra maestra, mientras que otros la criticaron por su complejidad y su carácter pesimista. Sin embargo, con el paso de los años, la obra ha sido revalorizada y hoy se la considera una de las obras más importantes de la literatura española contemporánea.