Los ricos, poco a poco y en silencio, van pesando más. Y quien lo entienda que se lo calle, pero no meter miedo.
Los ricos poco a poco se van apoderando del peso de los pobres, aunque estos sean más.
Son misterios del mundo mundial.
Queda claro que el poder pesa mucho, y que tener los bolsillos llenos también debe pesar lo suyo.
Lo curioso es que cuantos menos ricos hay, más poder y peso tienen.
Eso debe ser como poco… milagroso.
Podría parecer humor… pero no es humor.