Todos hemos tenido la sensación muchas veces, que somos unos inútiles buscando vuelos baratos, viajes de tren en super ofertas, restaurantes gratis y ayudas variadas. Casi no existen, pero algunos vecinos tienen una habilidad especial para lograr esas cazas curiosas.
Es publicidad contagiosa, y sí, a veces los hay, pero en tan pocas ocasiones que se necesitan multiplicar ellas solas para que hagan el efecto de que son muchas más de las que nos parecen.
Hay un componente de necesidad imperiosa de aparentar que eras más listo que nadie. Y de eso también se aprovechan los que hacen las oferta con cuentagotas.