Nos gusta que nos engañen, es un lujo darse cuenta y disfrutarlo


Es posible que no seamos tan tontos como nos creen los demás, es posible que disfrutemos de estos engaños de todos los días, y sin ser masocas, sin disfrutar del engaño, sino sufriendo pero admitiendo que nos gusta que nos engañen.

Hy nos venden todo al más caro y algo más pequeño para que no lo notemos. Lo que eran 450 gramos ahora son 350 gramos, y lo que valía 10 ahora vale 12.

Parece que ha subido un 20% pero es mentira, ha subido un 54% de precio total. Y seguimos comprándolo pues nos gusta sufrir. Disfrutamos siendo engañados.

Tranquilos que esto se nos pasará. Todavía puede ser peor, y caba la posibilidad de que nos engañen tanto, sin darse cuenta de que se están pasando, y de esa manera dejemos de disfrutar con el engaño.